En la crianza es importante evitar las etiquetas que encasillen. Haciendo sentir mal al niño no será la forma adecuada de formarle un autoconcepto adecuado. A veces vale la pena plantearnos como papás si lo que queremos es demostrar que tenemos autoridad sobre ellos, haciendo un buen ejercicio de humildad.
Reprender a un niño con frases como “estoy decepcionada de ti”, “ya no te quiero”, “haces que me ponga triste”, les crea una ansiedad autodestructiva de grandes proporciones, con graves consecuencias en su mente y personalidad.
Es mejor enseñarle a anticipar y reparar los errores, que a final de cuenta, siempre son una oportunidad de aprendizaje. Mira este video